Photobucket Si naciste entre 1976 y 1983 y crees que podes ser hijo o hija de desaparecidos, comunicate con la Comisión Hermanos de la Agrupación H.I.J.O.S. Entre todos te estamos buscando. hijos.identidad@yahoo.com.ar

jueves, 28 de febrero de 2008















AUSENC AS

POSTALES PARA NO OLVIDAR:

"Hace seis días Eduardo cumplió cincuenta años. hace treinta y dos que no pudo vivir su vida. esto es lo que quería decir porque creo que es importante. el tiempo como se ve en estas fotografías es lo que marca la paramente presencia de la ausencia, que es lo que creo que todos los familiares y argentinos conocemos. Yo quiero agradecerles a todos los que hicieron posible este trabajo y a todos los que se conmuevan con él". Estas fueron las palabras que dijo Gustavo Germano, en la apertura de la muestra fotográfica que se expone estos últimos días del mes de febrero y todo el mes marzo en el centro cultural Recoleta, en Buenos Aires. Sus palabras, y los retratos de la ausencia de su hermano, de un amigo, de un hijo, de un compañero fueron suficientes para sentir la presencia de una historia que no se va a olvidar.

"La desaparición forzada de personas, que debían esfumarse en la nada, fue el método elegido por la dictadura argentina de 1976-1983. Según varios de sus jefes, así buscaron evitar la condena de la Santa sede, con la aprobación sigilosa de la jerarquía argentina.
Pero a cambio consiguieron que aquél pasado atroz llegara a ser un insomne presente perpetuo, como la maldición que Neruda pensó para Franco. Más que los juicios penales, las investigaciones periodísticas o los ensayos filosóficos, el arte da cuenta del vacío lacerante que la ausencia inexplicable provoca. Como las esculturas de Juan Carlos Distéfano o los poemas de Juan Gelman, los cuadros de Carlos Alonso o los del español Ramos Gucemas, las fotografías de Gustavo Germano y los puntos que en cada leyenda reemplazan al nombre ausente evocan ese trauma fundador de la identidad argentina contemporánea y nos introducen al misterio del tiempo con la muda violencia de un gesto congelado."

Prologo de Horacio Verbitsky del libro fotográfico AUSENCIAS- 2007

1 comentario:

Jacinta dijo...

Compañeros de lo que de veras se trata es de poner lo inconcluso del pasado a salvo del olvido, y esta muestra fotográfica de Germano es una muestra de que ello es posible.
un abrazo